Read Comentarios psicológicos sobre las enseñanzas de Gurdjieff y Ouspensky Volumen II Online
Authors: Maurice Nicoll
Tags: #Autoayuda, #Esoterismo, #Psicología
¿Qué significa ese rumbo, ese viaje a través de sí mismo y de todos los falsos 'Yoes' en uno mismo? Después de estar un tiempo en el Trabajo es necesario examinar cotidianamente todo el tema del Trabajo y lo que dice. Hemos estado tanto tiempo echados debajo de la Escala de Jacob. ¿Qué significa levantarse? Es levantarse y salir de la taberna. Jacob está dormido al pie de la escala. Si, ¿pero qué significa levantarse? Hay una serie muy curiosa de acciones mentales interiores que nos llevan a levantarnos. ¿Ha tenido alguna vez verdaderos pensamientos personales —pensamientos que no tienen nada que ver con las cuestiones exteriores, con los exámenes que es preciso rendir, con representar la comedia diaria? ¿Ha pensado realmente alguna vez —con hondura— a qué se refiere el Trabajo y qué es usted? Es aquí, en este nivel, donde empieza el Trabajo y donde empieza la Voluntad Real. Es muy difícil de describir. Tales pensamientos no se refieren al deber, ni a las personas, ni a conservar la idea que se tiene de sí, ni del poder, o del dinero, ni de ninguna de estas cosas. Esta clase de pensamiento es muy extraña. Una de las cosas notables sobre esta indefinible clase de pensamiento es que comprende fácilmente las ideas del Trabajo. De hecho, parecería que fuera el Trabajo mismo. Cuando se aparta uno de sí mismo, se puede llegar a este nivel de pensamiento. Pero, desde luego, por el momento, en realidad no se existe. No se es nada. No es extraño, pues, que allí, en ese nivel, se puede hallar y ver lo que la Voluntad Real significa —y comprender que la voluntad ordinaria, tal como es llamada, es por comparación una mentira y una simple insensatez. En ese estado de pensamiento y de percepción interior se puede detectar lo que se necesita realmente hacer, lo cual es siempre sorprendente, algo en lo cual nunca se hubiera pensado. Y entonces se conoce con certeza que no es la voluntad de sí. Pero si el Trabajo para nosotros carece de sentido, si carecemos de la afirmación de algo superior, si no creemos en las influencias que provienen del Rayo de Creación, pues bien, ¿cómo esperar sentir un atisbo del sabor de la Voluntad Real? ¿Cómo, si se niega lo desconocido, esperar sentir lo que aún no se ha conocido? ¿No conoce todo ya? Se es una pequeña ópera, una breve comedia, que siempre se repite a sí misma. Hay óperas más importantes, comedias más largas. Si, pero ¿quién las siente realmente y actúa en ellas? ¿Quién siente profundamente lo que aún no conoce? ¿Quién se da cuenta de su ignorancia? ¿Se la
conoce
de seguro? ¿No ocurre así con cada uno de los que están aquí? Pues bien, no hay ningún sitio donde pueda entrar algo. Se sabe
ya.
Se conoce
todo.
¿Cómo piensan y se mueven? ¿Lo saben? Basta que se miren y se observen a sí mismos. Todos ustedes actúan y piensan y juzgan como si ya
conocieran.
Cuanto más
conocen,
menos conocen. ¿No es así? Desde luego, ¿pero han visto los dos lados de esta manera? Cuando se siente que
no se conoce,
se siente uno privado de Personalidad. Por eso es preciso aprender lo que significa no ser negativo frente a una posible nueva etapa de comprensión. No podrá llegar nunca a un nuevo nivel si se siente negativo en el momento en que es atacado su actual nivel y su importancia de sí disminuye. La
Voluntad,
en el sentido del Trabajo, proviene de un nivel superior al nivel en que se está, y por eso está por encima de toda obstinación y auto-importancia. La voluntad es una influencia superior que obra en un hombre y a la cual responde si es capaz de sentirla. Pero, si se tiene la seguridad de
conocerla
ya, ¿cómo se puede dejar sitio a alguna cosa nueva? Es
conocer
de este modo lo que detiene la nueva Voluntad en el momento de entrar. Basta cambiar el
conocer
para sentir que penetra una cosa nueva y a menudo extraña —a condición de no ser negativo. Esto es no ofrecer resistencia. La gente suele decir muchas veces que no conoce, que es ignorante. Pero ¿creen ustedes que quieren decir esto en realidad? ¿Creen realmente no conocer? ¿No se dan cuenta de que todos sus juicios y su manera interior de encarar los problemas en la vida se fundan en la idea de que
ya conocen?
Y así, a consecuencia de ello, de esta mescolanza de conocimientos equivocados adquiridos, vivimos y condenamos y peleamos y matamos y discutimos y hablamos. Todo esto es nuestra
máquina
¿y no han observado que la mayoría de las máquinas parecen haber sido creadas para la desdicha? Nos hablan de estudiar nuestras máquinas. ¿No han empezado a separarse de sí mismos, de su máquina? ¿Cómo, si aún no lo han hecho, esperan saborear la Voluntad Real, el Amo? No hay sitio para él. ¿Acaso no lo saben? Se pasan el día charlando y criticando —como si
conocieran.
No han advertido aún que no conocen— que en realidad no tienen la más remota idea y que se pasan todo el día diciendo disparates y mintiendo. No, pero ¿por qué? Porque no hay atención de sí, ni sinceridad interior, ni dolor de sí mismo, por esa cosa a la cual uno está atado como a una enorme máquina de ruedas giratorias de pensamiento y sentimiento. ¿Cómo puede visitarnos la
Voluntad Real,
cuando se está tan identificado con toda la maquinaria y se sigue diciendo que es 'Yo' y que éste conoce, y se sigue sintiendo que se conoce y se sigue actuando como si se conociera? Sorpréndase a si mismo en el momento en que dice algo. Es preciso que la Falsa Personalidad se disuelva y con ella toda su imaginación e ilusiones. Esto es lo que el Trabajo enseña. Es necesaria la comprensión de la propia mecanicidad. Esto es lo que el Trabajo enseña. Es ya una forma de Recuerdo de Sí, la Voluntad, la Voluntad Real, es capaz de encontrar su nivel, el Tercer Nivel de Conciencia. Entonces se siente un nuevo sabor, una cosa muy extraordinaria, una cosa delicada, vitalizante, llena de significación —no algo áspero y negativo y rechazante— como creemos que es la Voluntad. ¿Cómo esperamos lograr tal Voluntad si no nos aferramos al Trabajo y trabajamos? Si nos identificamos con todo en nosotros mismos, si pensamos que somos ya conscientes y poseemos la Voluntad Real, si creemos conocer y ser capaces de hacer, si creemos que somos una unidad, si vivimos contentos en nuestras emociones negativas, si siempre le echamos la culpa a alguien, si nos atribuimos cien y una cualidades que son puramente imaginarias, si nos justificamos a nosotros mismos a todo lo largo del día, si nunca nos observamos a nosotros mismos, si nunca nos recordamos a nosotros mismos, entonces ¿qué podemos esperar? ¿No han descubierto aún a qué se refiere el Trabajo y qué es lo que siempre está diciendo?
La Voluntad Real proviene de lo alto, de un nivel superior. ¿Qué significa superior? Donde vemos una sola cosa en nuestro nivel, en un nivel superior existen un millón de cosas. Nos imaginamos que la Voluntad es inflexible pero es preciso concebir que la Voluntad Real es infinitamente flexible y discerniente y que en última instancia contiene todas las cosas y de este modo lleva a la plenitud. Esto es llamado en los Evangelios πλήρωμα —plenitud de toda significación—. Empero, intentaré explicarlo de esta manera. La Voluntad Real está llena de nuevos significados. No es la ausencia de cosas, no la negación y el rechazo de hacer cosas. Su verdadera naturaleza no consiste en las palabras: "No quiero". "Quiero comprender mejor", es una mejor manera de formularlo. Es conocida la esterilidad de la gente que siempre dice
no quiero.
Parecería como si murieran en sí mismas demasiado temprano debido a esta idea negativa de voluntad que no trae ningún significado nuevo. Las cosas negativas sólo conducen a cosas negativas.
En relación con la idea de que la Voluntad Real tiene una significación cada vez más plena y de este modo es positiva y negativa en calidad, podemos traer a colación esta noche las asociaciones de pensamiento, otra idea del Trabajo. Las ideas de Trabajo estriban en establecer nuevas asociaciones y de este modo nuevas maneras de ver y sentir la vida. La idea que podemos presentar aquí es la de las
octavas anteriores.
Tomemos dos notas
Do
y
Re.
Entre ellas existe una octava completa, a saber:
Y asimismo, entre cada una de las notas de la pequeña octava existe una octava completa. Ahora bien, ¿cómo es posible comprender el significado de esto? Significa percepciones cada vez más sutiles, capaces de ver diferencias cada vez más sutiles? Donde se veía simplemente
Do — Re
, se ve ahora una octava completa de diferencias más sutiles y así sucesivamente. Es decir que se ven significados cada vez más sutiles. Imaginamos que nos conocemos a nosotros mismos, o a los otros. Esto es, por así decirlo,
Do — Re
en una escala general. Pero con el fin de desarrollar esas percepciones más sutiles, y de este modo eliminar la violencia de
Do — Re
va una escala más general, se requiere la disposición a aceptar el Trabajo y sus ideas como punto de partida. Entonces mediante esta primera y verdadera disposición, el Trabajo —es decir, nuestros centros superiores— empiezan a enseñarnos. De modo que ante todo es preciso que la Voluntad Real sea posible aceptando el camino que conduce a ella. Si no se quiere el Trabajo, se empieza de un modo equivocado. Cada cosa tiene diversos significados. Ver una cosa sólo y siempre a la misma luz es lo mismo que ver
Do — Re
en la escala general —tal como solemos hacerlo en términos de topes y prejuicios: Una cosa es correcta o es incorrecta. No hay en ello verdadero pensamiento. Pero las cosas son más complicadas. La diferenciación, es decir, la apreciación de los matices diferenciales que existen entre los que antes se veían como opuestos, es el comienzo del crecimiento de la Voluntad. Podemos tratarnos a nosotros mismos o a los demás de un modo muy generalizado e impropio debido a la falta de percepción interior. El Sr. O., una vez que hablaba del propósito y de la Voluntad, dijo que al principio se asemejaba a mirar de noche a través de un valle una luz distante a la cual deseábamos llegar. "Y echábamos a andar, pensando que era una cosa muy sencilla. Pero entre esa distante luz y nosotros se extendía todo el valle y muchas otras lucecitas y muchos otros caminos tortuosos. Cuando se piensa en el significado de la buena voluntad, ya sea hacia el Trabajo o hacia otra persona, a veces se da uno cuenta de que es quizás empecinamiento. Al darse cuenta de ello se empieza a ver que la Voluntad Real quiere decir una gran significación y comprensión y una gran flexibilidad y capacidad de ir en contra de
lo que se consideraba mejor.
Ello requiere la activa paciencia exigida por el Trabajo, y que es tan fácil de comprender una vez que se deja de tener ilusiones acerca de sí mismo y del propio conocimiento y los propios juicios correctos y todo el resto de las mentiras a cuyo amparo tratamos de vivir. Esta clase de paciencia es llamada en el Trabajo la
Madre de la Voluntad.
Intentemos ahora reunir las principales ideas expuestas en esta disertación. Muchas veces la gente gusta de "hacer cosas", como tiene la costumbre de decir. A esto lo llaman voluntad. Por cierto tienen indudablemente razón en esta escala. Pero muchas veces ocurre que no reparan en las cosas que podrían hacer para sí y de este modo no ven las cosas que están al alcance de su mano, ante sus propios ojos. Siguen una línea recta y creen que de este modo dan pruebas de voluntad. No cabe duda de que lo es en pequeña escala. Pero todos ustedes ven que es posible no reparar en muchas cosas apegándose a la estrecha línea del empecinamiento y tomándolo equivocadamente por la Voluntad Real. Es, claro está, voluntad de sí o empecinamiento —salirse con la suya, ser eficiente, ser el primero, etc. Pero la Voluntad Real es diferente. Es, por su sabor, muy suave. Si por la reflexión nos damos cuenta de que la consideración externa es comprender la existencia de los otros y ver sus dificultades, según la comprensión de las propias dificultades, y obrar de acuerdo con ello (si se puede hacerlo), se comprenderá por qué dije en la disertación anterior que la Voluntad Real y la consideración externa están estrechamente relacionadas. Ver a otra persona prescindiendo de lo que
se
desea ver y hacer, es recibir nuevas impresiones. Percibir nuevas impresiones es un incremento de significación —en realidad, una nueva octava de fuerza. Resolver un problema prescindiendo de la voluntad de sí o empecinamiento, prescindiendo de hacer la propia voluntad, ver una solución debido a un nuevo insumo de significación— es una de las ideas de Voluntad en el Trabajo. "¿A qué se asemeja", pregunté al Sr. O., "la Voluntad Real?" Me contestó: "Se asemeja a ver la solución de un difícil problema de matemáticas." Ello significa que es una fuerza que une a las cosas en un acrecentamiento de significación. Es preciso recordar que en los centros superiores no hay opuestos, no hay contradicciones. Traten de imaginar a qué se asemejaría sentir las influencias de los centros superiores —en las cuales no hay ni opuestos ni contradicciones. Luego piensen en el nivel de voluntad al que tomamos por Voluntad— esto es, la voluntad de sí o empecinamiento. Todo el Trabajo, toda la reflexión y sentimiento de la enseñanza esotérica, conducen a la Voluntad Real— esto es, al
Amo.
A no ser que acepten voluntariamente el Trabajo por medio de la buena voluntad, nada se opondrá a que se alcance el Amo. Por eso he hecho tanto hincapié sobre la cuestión de la sinceridad interior en lo que concierne al Trabajo. Es por eso que la octava de Trabajo empieza con la valoración de las ideas del Trabajo y tiene su punto de partida en el nivel de Ser de un hombre que posee el Centro Magnético. Esta es la primera señal de un Ser especial.