La dicha de estar juntos para mis hijos, Joe, Mahtob y John.
Hacia el final de su enfermedad, Mahtob visitaba frecuentemente a su abuelo. Su amor no se expresaba con muchas palabras, sino por medio de pequeños gestos…
Mahtob y yo continuamos respetando muchas tradiciones y festividades iraníes. Aquí, la fiesta del No Ruz de 1992.
A Mahtob y a mí siempre nos ha gustado cocinar juntas. ¡Nuestro próximo libro será seguramente un libro de cocina!
Mahtob había encontrado en mi padre, gran amante de la pesca, una complicidad tan fuerte como la que yo tenía con él.
Riaz, el marido paquistaní de Christy, había prometido que jamás se llevaría a sus hijos… Pero ella tuvo que ir a luchar para recuperarlos a un pueblo de Peshawar…
Johnathan y Adam, los hijos de Christy, con su abuela paquistaní.
Christy y sus hijos en medio de su familia paquistaní. Después de la muerte accidental de su marido, Riaz, intentaron retener a los niños.
Sentí una gran felicidad cuando Christy vino a mi casa con sus dos hijos mayores y con Eric, el «benjamín», que tanto tuvo que luchar por vivir…
Craig cruzó fronteras peligrosas para recuperar a sus dos hijas, Stephanie y Samantha. Hoy corre menos riesgos cruzando de vez en cuando el Estado de Michigan para venir a visitarme.
Mariann pensaba que jamás iba a volver a ver a Adam, su pequeño raptado y llevado a Irak poco antes de la Guerra del Golfo. Felizmente, volvieron a encontrarse. Pero Adora, su hija, sigue allí…
BETTY MAHMOODY vive en Michigan y ha relatado en
No sin mi hija
, con la colaboración de William Hoffer, la odisea de su huida de Irán con su hija, tras ser retenidas ahí contra la voluntad de ambas.
Arnold D. Dunchock es abogado y reside en Michigan.
Betty Mahmoody y Arnold D. Dunchock han fundado conjuntamente «One World: For Children», organización dedicada a buscar soluciones a los problemas de derecho internacional creados por el secuestro o retención abusiva de niños por sus padres.