Authors: Jordi Sierra i Fabra
Lo que sintió en ese instante fue ira.
Unos desconocidos colándose en su intimidad para atacarla y desarbolar su sistema nervioso.
Se levantó de la silla y fue a la ventana. La suya no daba a la calle, como la de su amiga. Ella dormÃa en una de las habitaciones interiores. Buscó el origen de la música sin dar con él. PodÃa proceder de cualquier ventana. Pensó en gritar pero se contuvo. Cerró los ojos e intentó comprender y comprenderse. Comprender aquel sonido y la desmedida letra del tema, y comprenderse a sà misma en su negación del presente y de la realidad.
La diferencia era que ella conocÃa el pasado y Elisabet, no. La diferencia era que ella podÃa comparar, y el resto de chicos y chicas de su edad, no. Su amiga no tenÃa ni idea de quiénes eran Peter Gabriel, Jim Morrison, Neil Young, Van Morrison, Janis Joplin, Joni Mitchell o Patti Smith, ni siquiera monstruos como Leonard Cohen o Tom Waits. Bob Dylan decÃa que era un cadáver ambulante con voz de regadera.
Regresó al ordenador y se olvidó de «Fracaso». En su lugar tecleó otro enunciado:
«Razones y fundamentos para decir que Brainglobalnoise representan un salto a la prehistoria de la música».
Y escribió:
«Estoy escuchando, a mi pesar, pues la música se cuela por mi ventana, el sonido más odioso del momento...».
ROGELIO
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El primer tema del CD,
Kontaminación
, ya sonaba en todas partes. Era el primer paso.
Pero sólo eso.
Con lo que se habÃan gastado en el lanzamiento, que sonara en todas partes era lo de menos. Lo duro venÃa ahora, asentarlo todo, conseguir que el segundo tema del disco fuera un éxito mayor, y espontáneo, y que la primera gira del grupo arrasara y generara un millón de fans.
Un millón.
Como si los tiempos no hubieran cambiado.
â¿Tú qué opinas? âle preguntó Nacho Pons.
Dejó que la pregunta flotara en el ambiente.
La mayorÃa de las canciones se parecÃan entre sÃ. Tres guitarras desatadas, una baterÃa machacona, un bajo galopante y una voz, la del propio guitarra solista, gritando-cantando-rapeando según la parte del tema que interpretara. HabÃan bautizado su estilo como Trash-rap-hop-metal-hardcore. Otro exceso. Siempre le habÃa parecido un sonido tremendista, pero buscarle una etiqueta... La mayorÃa de artistas eludÃan las etiquetas. Ellos, sin embargo, estaban dispuestos a ser diferentes.
A romper moldes.
âNo estoy seguro âmanifestó con voz inexpresiva.
âPero la cosa está entre
Kaos
y
Makillaje radioactivo
, ¿no?
â¿Por qué lo dices?
âBueno âsu interlocutor hizo un gesto evidenteâ, la primera habla de las inquietudes de los jóvenes ante lo que se les viene encima, y la segunda, de esa chica enamorada que se deshace mientras espera que regrese su novio de la guerra termonuclear... Son actuales.
â«Actuales» no es la palabra más adecuada.
â¿En qué sentido lo dices?
âEn el único posible.
âLas canciones que gustan a las adolescentes son siempre las que les afectan de manera personal, las que abordan sus pensamientos e intimidades.
â¿Y crees que el lamento de una chica a la que se le cae la cara a pedazos mientras espera que su novio vuelva de la guerra impresionará a una adolescente de ahora?
âCaray, Rogelio, parece como si no te gustara el disco, o peor, que no creyeras en el producto.
El producto.
Unos pocos años antes aún era el artista; como mucho, el proyecto. ¿Cuándo lo habÃan rebajado a la categorÃa de «producto»?
âEvidentemente, éste no es mi tipo de música. âFue sinceroâ. Pero llevo toda la vida en esto y sé lo que funciona y lo que no, y esto nos va a funcionar.
âMás nos vale âsuspiró Nacho Pons.
¿Cuándo no habÃa conocido la música malos tiempos, aun en momentos de bonanza?
A veces, la sensación de que se llegaba al fin de una era se hacÃa tan persistente...
âYo votarÃa por
Mezklas
âanunció de pronto.
â¿Ãsa? ¿Por qué? Es la más suave de todo el CD.
âPues por eso.
â¿No es mejor mantener el tono álgido?
âLanzamos
Mezklas
como segundo tema, y si no funciona, tenemos a punto
Kaos
o
Makillaje radioactivo
.
âNo podemos permitirnos un pinchazo con el segundo
single
.
âLos temas suaves, y no es que éste lo sea, aunque tiene momentos de calma, son los que asientan a las bandas.
âTardan más en calar.
âPero si calan, son la bomba. Y te repito que
Mezklas
no es precisamente una balada romántica.
Los dos ejecutivos se quedaron un momento en silencio. El despacho de Rogelio daba a la calle Calvet, asà que el ruido del asfalto llegaba con nitidez hasta ellos. Pese a que la ventana estaba cerrada y disponÃa de un cristal doble, los cláxones no daban tregua. Muchas veces optaba por escuchar música sólo para poder aislarse y trabajar, aunque cada vez estuviese menos allà y más en la calle, haciendo otras actividades al margen del
marketing
y la promoción. Ya estaban en cuadro debido a los recortes de personal.
La piraterÃa los devoraba más rápido que nunca.
El último disco de oro conseguido por Discos Karma parecÃa un lejano eco del pasado.
La puerta del despacho se abrió en ese instante.
âRogelio... âanunció la voz de Pascual Iriarte abriéndola sin esperar su permisoâ. ¡Ah, Nacho! âcambió el tono al verlo también allÃâ. Nos llama el
Boss
.
No era Springsteen. Era Marcelo Novoa, el director.
Los dos ejecutivos se pusieron en pie.
Hora de repasar temas.
Siempre al filo de la navaja.
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Marcelo Novoa era uno de los veteranos, curtido en mil guerras. HabÃa pasado por CBS, Polygram y Emi en los años de esplendor del rock antes de fundar su propia compañÃa discográfica; y en Barcelona, nada de caer en la tentación de irse a Madrid. Con su buen ojo, Discos Karma habÃa conseguido tres éxitos consecutivos en su primer año, y otros diez en los cinco siguientes. Era el momento dorado de las pequeñas compañÃas, o las independientes, como se las llamaba todavÃa. Lo malo era que las multinacionales actuaban siempre como depredadoras. Cuando una pequeña compañÃa conseguÃa un éxito, afianzar a un grupo descubierto por ella, aparecÃa la correspondiente
major
dispuesta a poner una millonada sobre la mesa para llevárselo. O eso o tentar al cantante para que iniciara una carrera en solitario. Las pequeñas compañÃas tenÃan que reinventarse cada dÃa, conseguir al menos un éxito al año. Una presión añadida que la mayorÃa no conseguÃa superar.
Con la piraterÃa y las descargas ilegales de Internet masacrando el mercado, el futuro siempre era negro.
Aunque a cada momento aparecieran nuevas promesas, cantantes, grupos, que demostraban que la música nunca se terminaba, ni los sueños de quienes querÃan ser artistas.
Rogelio fue el primero en sentarse. Lo hizo frente al director de la empresa. Nacho y Pascual lo secundaron, uno a cada lado. Marcelo Novoa habÃa superado los cincuenta con creces, pero se mantenÃa joven, con esa pátina de energÃa que siempre aporta el mundillo de la música. Nacho y Pascual andaban en la treintena. Sólo él se quedaba en esa indefinida tierra de nadie que era el final de la juventud y el comienzo de la madurez, con la frontera de los cuarenta ya a la vista.
âVamos a lanzar
Makillaje radioactivo
como segundo
single
âles soltó el director de Discos Karma de forma contundente, en un tono que admitÃa poca réplica.
Nacho Pons miró a Rogelio de soslayo. Un gesto que no pasó inadvertido a su superior.
â¿Alguna objeción? âMarcelo Novoa lo miró.
âNo ârespondió Rogelio.
â¿Pero?
âVotaba por
Mezklas
.
â¿Por qué?
âTiene un tono algo más... reposado. Esa parte que parece lenta incluso es melódica.
â¿Melódica? âSu jefe abrió unos ojos como platosâ. ¿Y quién quiere algo melódico hoy en dÃa? ¡Esa palabra incluso ha desaparecido del diccionario de la música! Brainglobalnoise es eso, Ruido Global y Cerebral. Caña. No creo que vayamos por ahÃ.
âEl mercado siempre sorprende.
âEl mercado hace lo que le decimos nosotros. ¿O crees que esa panda de descerebrados de quince años tiene criterio? Les hemos lanzado un grupo total, y van a querer música total. Si además imponemos una estética...
âEs mi opinión. Sólo eso.
â¡Coño, Rogelio, tu opinión! âestalló con sorpresa el hombreâ. ¡La opinión del chico del súper me la trae floja, pero la tuya no! Se supone que eres el director de marketing y promoción. âMiró a los otros dosâ. ¿Qué opináis vosotros?
Nacho Pons tragó saliva. Pascual Iriarte no movió ni un músculo. Los dos temÃan las explosiones de ira de su jefe. Y cada vez las tenÃa más seguidas.
âYo estaba hablando con Rogelio de eso mismo ahora âdijo el primero.
â¿Y?
âDudaba entre
Makillaje radioactivo
y
Kaos
.
â¿Por qué
Kaos
?
âLas dudas de la protagonista sobre el futuro...
âEso es una mierda âlo desarmóâ. Todo el mundo tiene dudas sobre el futuro, jóvenes y viejos, y musicalmente no es mejor que
Makillaje radioactivo
. Lo de la chica esa que se va descomponiendo mientras espera a su amor es mucho más fuerte. âMiró a Pascual Iriarteâ. ¿Y tú?
â
Makillaje radioactivo
, sin duda.
âEntonces estamos de acuerdo.
âSà âdijeron los dos que flanqueaban al jefe de marketing y promoción.
â¿Rogelio?
âSupongo que es un riesgo. Lo mismo que lanzar
Mezklas
.
Marcelo Novoa arrugó la cara.
âNo te veo muy convencido âmasculló.
âLo estoy, tranquilo.
âSi no crees en lo que vendes... no lo vendes, ya sabes mi teorÃa. âMantuvo el rictus amargo en la boca.
âMarcelo, ¿recuerdas lo que te dije cuando me hiciste escuchar a Brainglobalnoise por primera vez?
âJoder si lo recuerdo.
âAhora son nuestro lanzamiento estrella de este verano. Aceptamos el riesgo y ya está. Y como tú dices, vamos a por todas, descuida.
âEs que si no funciona, a donde nos vamos es a la mierda âsentenció categórico el director de Discos Karma.
âEso lo dices todos los años, con cada lanzamiento.
âY cada vez va a peor. ¿No miras las cifras de ventas o qué? Nos lo estamos gastando todo en Brainglobalnoise. Todo, Rogelio. Habrá que ajustar al máximo si queremos hacer un vÃdeo de apoyo para
Makillaje radioactivo
. O superamos los cien mil discos vendidos o...
Cien mil.
Cifras de «otros tiempos».
âEstamos consiguiendo mucho impacto, difusión; todo el mundo habla ya de Brainglobalnoise y de
Kontaminación
. Es nuestro lanzamiento más fuerte en años.
âEso hay que traducirlo en ventas âapostilló Marcelo Novoa.
âUna cosa lleva a la otra. El Corte Inglés, FNAC, Discos Castelló... todos están reponiendo existencias. Basta con mirar en la Red. Ya hay muchas páginas dedicadas a ellos, y las revistas se pelean por tenerlos.
âSi hace falta, que se desnuden, ¿eh?
âSon unos desmadrados por sà mismos. No hará falta que los anime.
â¿Alguna famosilla de medio pelo que pueda salir en una foto con David? âseñaló al cantante y guitarra del grupo, en primera fila del póster que presidÃa su despacho.
âDe momento, ésa es su parte oscura. De puertas adentro aún tiene novia.
â¡La madre que lo parió! ¿Está loco o qué? ¿No le hablaste de eso?
â¿Qué quieres, que le diga que pase de su chica asÃ, sin más?
â¡Como le dé a la niña por largar diciendo que es la novia de David, nos jode!, ¿estamos?
âEn cuanto se metan en la gira, la cosa caerá por su peso, tranquilo.
â¿Tranquilo? ¿No sabes de qué va esto o qué?
Nacho Pons y Pascual Iriarte se removieron inquietos en sus asientos. A veces no entendÃan la rara amistad que unÃa al dueño de la discográfica con su director de
marketing
y promoción. Rogelio era el único que se atrevÃa con él. Pero nunca sabÃan si se peleaban o sólo discutÃan. El carácter fuerte y agresivo de uno chocaba con el más reposado y reflexivo del otro. Marcelo Novoa era todo espontaneidad, soltaba lo primero que le pasaba por la cabeza. Rogelio, en cambio, era mucho más ladino, astuto.
Cerebral.
Y casi misterioso, porque, de hecho, ninguno sabÃa mucho de él.
â¿Cuándo quieres lanzar
Makillaje radioactivo
? âpreguntó.
âUna semana antes de que dé comienzo la gira. Bombardeo masivo en radio y a ver qué se puede hacer en la tele y en la prensa escrita.
âDe acuerdo. âRogelio se puso en pie antes de preguntarâ: ¿Hay algo más?
Â
Â
Al cerrar la puerta de su piso y escuchar el silencio, se sintió a salvo.
Cada vez le ocurrÃa más a menudo.
Y le preocupaba.
âNada es igual a partir de los cuarenta âle repetÃa su padre.
Aún los sentÃa lejos, pero ya todo el mundo le hablaba de ello.
Como si de una maldición ineludible se tratara.
Rogelio fue a su habitación y se desnudó por completo. Dudó si tomar una ducha, porque el calor de la primavera ya era casi el del verano, y decidió que mejor no, era capaz de quedarse dormido bajo el agua. Llevaba tantos dÃas estresado con el maldito lanzamiento de Brainglobalnoise que ni siquiera tenÃa ganas de salir. ¡Ãl!