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Authors: Frederique Molay

Tags: #Intriga, #Policíaco, #Thriller

La séptima mujer (29 page)

BOOK: La séptima mujer
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Todos podían oír el intercambio de palabras. Lo entendieron inmediatamente: Nico había modificado su estrategia. Puesto que la empatía no había dado resultado, puesto que el tiempo apremiaba, había decidido atacar al asesino de frente. La táctica era peligrosa pero no tenía otra elección. Tenían que estar listos para intervenir. Tal vez Nico daría una señal. Sabía forzosamente que los hombres estaban en guardia y que no habían abandonado el lugar. Podía dar por hecho que sus compañeros de equipo estaban listos para irrumpir con el arma en la mano. Era una partida de dados.

—¿Y sabes qué? —aulló Nico—. Hace un rato te he mentido. Me he tirado a Caroline. Es realmente buena. Pero ella no es para ti. Nunca podrás jugar con ella como te aprovechaste de las otras. ¡No eres más que un miserable! Al final, te he pillado.

Fiori se puso lívido. Sus labios expresaron una especie de repugnancia. Nico lo había ofendido donde más le dolía.

—Armelle Vilars nunca ha querido acostarse contigo, me lo ha dicho —prosiguió Nico—. Le hacía reír que la deseases. Estaba segura de que eras un desastre en la cama. ¡Eres un desastre, Fiori! ¡Un neurótico del sexo! ¡Un tipo que no sabe dar placer a las mujeres! ¡Un incapaz! ¡Prefieres atarlas y mirarlas!

—¡Cállate! ¡Cállate o me la cargo!

—¡¿Ah, sí?! ¿Por qué no empiezas conmigo?

—Me estás cabreando, Sirsky…

—¿Ya no me llamas por mi nombre, Fiori? ¿Ya no somos colegas? ¡Tienes razón, no tengo nada que ver con un cabronazo como tú!

Nico sentía que sus fuerzas disminuían. Intentarlo todo antes de que fuese demasiado tarde era su único objetivo. Sus hombres estaban ahí, lo sabía. Sólo tenía que decir una palabra e irrumpirían en la estancia. El momento se acercaba. Sería una jugada de póquer. Tenía confianza; su equipo era de fiar. O si no moriría con Caroline. La imagen de Dimitri le vino a la mente. ¿Tenía derecho a abandonar a su hijo? ¿Qué sería de él? ¿Le había dicho suficientes veces cuánto lo quería, lo orgulloso que estaba del hombre en que poco a poco se estaba convirtiendo?

El revólver del asesino se apartó ostensiblemente de la sien de Caroline. La duda se leía en su rostro, necesitaba calmarse. Nico sabía que no debía darle esa oportunidad, no debía proporcionarle un respiro.

—¡Ya lo tengo! ¡La puta de tu madre te volvió impotente! ¡Es eso, confiésalo!

El arma lo apuntaba. Fiori iba a disparar cuando la silla se agitó con un movimiento de balancín y cayó violentamente hacia atrás. Nico buscó desesperadamente la mirada de Caroline. La joven había logrado distraer la atención del asesino.

—¡Go! —aulló Nico, mientras una segunda detonación hendía el aire.

Era la señal.

Kriven asestó un violento golpe con el hombro a la puerta y proyectó su cuerpo hacia delante. Localizó donde estaba Fiori y disparó sin vacilar ni un segundo. Al mismo tiempo, Rost reconoció la voz de su jefe. Les pedía que interviniesen. Entonces irrumpió en el salón, con Théron y Vidal detrás de él. Le doctora Dalry estaba tumbada en el suelo; imposible decir si estaba muerta. Vio a Nico todavía de pie. Fiori apuntaba al jefe de la brigada. Con un gesto seguro, Rost apretó el gatillo de su arma.

Nico permaneció en equilibrio durante un breve instante. La verdad era que ya no sentía la pierna, que ya no lo sostenía. Pero no podía decir dónde le había dado la segunda bala. Se sentía arrastrado. Quería pedir perdón a toda su familia, a su hijo, a Caroline también. Si no se hubiera cruzado en su camino, nunca se habría visto implicada en aquel drama. ¿Lograría olvidarlo? Confiaba en que sí.

Otras dos detonaciones lo sacudieron, agitando el aire a su alrededor. Su pierna cedió. Se desplomó. En su caída, no dejaba de mirar fijamente a Fiori. El asesino vaciló, con los ojos redondos por la sorpresa. Dos manchas de sangre se extendían por su suéter A la altura del tórax. Dos impactos de bala. Su cuerpo cayó hacia atrás, como en cámara lenta. Chocó contra el suelo en un estrépito de cristales rotos; sin duda los jarrones de vidrio que Nico había visto posados en el parqué.

Intentó aferrarse a la realidad. Vio moverse a Caroline y soltarse las ataduras. Luego avanzó hacia él de rodillas. Lo palpó, profiriendo órdenes incomprensibles. Le pedía que se aferrase a la vida…

Los hombres se movían a su alrededor. Lo abofeteaban sin contemplaciones; habría preferido las caricias de la mujer. Estaba viva…

El cabrón no mataría a la séptima mujer. Se sintió feliz. Las siluetas de los cuerpos inclinados sobre él se volvieron borrosas. El sonido de las voces se debilitó. Como en un sueño, se imaginó a su hijo, ese bebé que estrechaba con ternura entre sus brazos. Todo se aceleraba. Ahí estaba corriendo a su lado, indicándole a gritos cómo llevar el triciclo. Globos multicolores se elevaban volando. Se oían las carcajadas de Dimitri. Su hijo lo animaba mientras atrapaba los amarillos, los azules, los rojos, los verdes… Le pedía que se aferrase a la vida…

¿Iba a morir?

¡No, no ahora que estaba Caroline!

¡Estaba dispuesto a luchar!

Notas

[1]
El número 36 del Quai des Orfevres, en París, es la sede central de la Policía Judicial francesa y se conoce también como «36» (N. de la T.)
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[2]
El Hôtel-Dieu era el antiguo hospital central de la ciudad. (N. de la T.)
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[3]
Los DOM-TOM son los Départements d’outre-mer y Territoires d’outre-mer, las provincias y territorios franceses de ultramar. (N. de la T.)
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[4]
TGV (Train à Grande Vitesse), trenes de alta velocidad franceses. (N. de la T.)
<<

[5]
El palacio del Élysée es la residencia oficila del presidente de la República Francesa, y suele utilizarse para referirse a la presidencia y a la propia persona del presidente. (N. de la T.)
<<

[6]
SAMU (Service d’aide médicale d’urgence), servicio móvil de urgencias médicas francés (N. de la T.)
<<

[7]
Es decir, de entre los años 1814-1830, durante la Restauración de los Borbones tras la caída del Imperio Napoleónico (N. de la T.)
<<

[8]
SALVAC (Système d’Analyse des Liens de la Violence Associée au Crime). Sistema de Análisis de los Vínculos de la Violencia Asociada al Crimen.
<<

[9]
La Chaîne Info, más conocida por las siglas LCI, es una cadena de televisión privada francesa de información las 24 horas.
<<

[10]
Los premios César son el equivalente de los Goya españoles (N. de la T.)
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[11]
La Samaritaine son unos célebres grandes almacenes de París. (N de la T)
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