La velocidad de la oscuridad (47 page)

BOOK: La velocidad de la oscuridad
10.5Mb size Format: txt, pdf, ePub

Si alguien les dijera a los últimos arces que pueden cambiar y vivir felizmente en el clima más cálido, ¿decidirían hacerlo? ¿Y si eso significara perder sus hojas transparentes que entregan colores tan hermosos cada año?

Inspiro profundamente y huelo las hojas húmedas, el verdín sobre la roca, los líquenes, la roca misma, el suelo... Algunos artículos decían que los autistas son demasiado sensibles a los olores, pero a nadie le importa eso en un perro o un gato.

Escucho los ruiditos del bosque, los ruidos diminutos incluso hoy, con las hojas verdes casi planas y silenciosas en el suelo. Unas cuantas aún cuelgan y se agitan un poco en el viento, de puntillas en una rama cercana. Las patas de la ardilla que se escabulle rascan la corteza mientras se agarran y sueltan su presa. Alas que se agitan y oigo un suave
zzeeeet-zzzeeet
de un pájaro que nunca llego a ver. Algunos artículos dicen que los autistas son demasiado sensibles a los sonidos, pero a nadie le importa eso en los animales.

Me inclino y saboreo la piedra, el verdín, el liquen, tocándolos con la lengua aquí y allá, deslizándome por la piedra hasta las hojas húmedas de su base. La corteza de un roble (amarga, astringente), la corteza de un chopo (insípida al principio, luego levemente dulce). Extiendo los brazos, giro en el camino, mis pies aplastan ahora la piedra aplanada (nadie que lo vea y se moleste, nadie para reprenderme, nadie para negar con la cabeza). Los colores giran a mi alrededor con mi giro; cuando me detengo no se detienen al principio, sino gradualmente.

Abajo y abajo... encuentro un abeto que tocar con la lengua, sólo uno con hojas aún verdes. No tiene ningún sabor. La corteza de otros árboles, la mayoría no los conozco pero sé que son diferentes por sus pautas. Cada uno tiene un sabor indescriptiblemente distinto, un olor levemente distinto, una pauta de corteza levemente distinta más áspera o más suave bajo mis dedos. El ruido de la cascada, al principio un suave rugido, se disuelve en los muchos sonidos que lo componen: el choque de la cascada principal al golpear las rocas de abajo, los ecos de ese rumor que se convierte en rugido, las gotitas y salpicaduras del choque, de las pequeñas cascadas, el suave golpetear de las gotitas individuales al caer sobre las hojas cubiertas de escarcha.

Contemplo caer el agua, intentando ver cada parte, las masas aparentes que fluyen suavemente hasta el borde y luego se deshacen en el camino... ¿Qué sentiría una gota al deslizarse sobre esa última roca, al caer hacia la nada? El agua no tiene mente, el agua no puede pensar, pero las personas, las personas normales, escriben sobre ríos furiosos y cataratas enfurecidas como si no creyeran en esa incapacidad.

Una ráfaga de viento trae el agua a mi cara; algunas gotas desafían la gravedad y se alzan con el viento, pero no regresan a donde estaban.

Casi pienso en la decisión, en lo desconocido, en no poder volver atrás, pero no quiero pensar hoy. Quiero sentir todo lo que pueda y tener esto que recordar, si tengo recuerdos en ese desconocido futuro. Me concentro en el agua, viendo su pauta, el orden en el caos y el caos en el orden.

Lunes. Nueve y veintinueve. Estoy en las instalaciones de la clínica de investigación, al otro lado de la Sección A del campus. Estoy sentado en una fila de sillas entre Dale y Bailey.

Las sillas son de plástico gris claro con cojines azules y verdes y rosa en el asiento y el respaldo. Al otro lado de la sala hay otra fila de sillas; veo los sutiles bultos y huecos donde la gente se ha sentado en esas sillas. Las paredes tienen una textura a franjas en dos tonos de gris bajo un zócalo gris claro y una capa blanca granulosa por encima. Aunque la pauta de abajo es a franjas, la textura es granulosa como la de arriba. Al otro lado de la habitación hay dos cuadros en la pared, uno un paisaje con una montaña en la distancia y el otro un ramo de flores rojas en una jarra de cobre. Al fondo de la sala hay una puerta. No sé qué hay más allá de la puerta. No sé si ésa es la puerta que atravesaremos. Delante de nosotros hay una mesita con dos ordenadas filas de visores personales y una caja de discos etiquetada: «Información al paciente: comprenda su proyecto.» La etiqueta del disco que puedo leer dice: «Comprenda su estómago.»

Mi estómago es un terrón frío dentro de un enorme espacio hueco. Siento la piel como si alguien la hubiera tensado demasiado. No he mirado a ver si hay un disco con la etiqueta «Comprenda su cerebro». No quiero leerlo si lo hay.

Cuando intento imaginar el futuro (el resto de este día, mañana, la semana que viene, el resto de mi vida) es como mirar la pupila de mi ojo, y sólo el negro me devuelve la mirada. La oscuridad que está allí ya cuando la luz acelera, desconocida e imposible de conocer hasta que la luz llega.

No saber llega antes que saber; el futuro llega antes que el presente. A partir de este momento, pasado y futuro son lo mismo en direcciones diferentes, pero yo voy en este sentido y no en ese otro.

Cuando llegue allí, la velocidad de la luz y la velocidad de la oscuridad serán lo mismo.

21

Luz. Oscuridad. Luz. Oscuridad. Luz y oscuridad. El filo de la oscuridad. Movimiento. Ruido. Ruido otra vez. Movimiento. Frío y cálido y calor y luz y oscuridad y áspero y suave, frío, DEMASIADO FRÍO y DOLOR y cálido y oscuro y ningún dolor. Luz de nuevo. Movimiento. Ruido y ruido más fuerte y DEMASIADO RUIDO VACA MUGIENDO. Movimiento, formas contra la luz, pinchazo, cálida vuelta a la oscuridad.

La luz es el día. La oscuridad es la noche. El día es levantarse ahora es hora de levantarse. La noche es acostarse cállate duerme.

Levántate ahora, siéntate, extiende los brazos. Aire frío. Contacto cálido. Levántate ahora, ponte de pie. Frío en los pies. Vamos ahora anda. Camina hasta el sitio es brillante hace frío huele asusta. Lugar para hacer pipí o hacer popó, lugar para limpiarse. Extiende los brazos, agárrate a la barandilla. Fría barandilla. Ruido que asusta, ruido que asusta. No seas tonto. Estate quieto. Cosas golpeando, muchas cosas golpeando, resbaladizas y húmedas, demasiado frío entonces cálidas luego demasiado calientes. Muy bien, no pasa nada. No muy bien. Sí, sí, estate quieto. Sensación pegajosa, deslizándose. Limpia. Ahora limpio. Más húmedo. El tiempo se acaba, levántate. Frotándote por todas partes, la piel cálida ahora. Ponte la ropa. Ponte los pantalones, ponte la camisa, ponte las zapatillas. Hora de caminar. Agarra esto. Camina.

Lugar para comer. Plato. Comida en plato. Toma cuchara. Cuchara con comida. Comida en boca. No, sujeta recta la cuchara. La comida perdida. La comida cae. Agarra bien. Inténtalo de nuevo. Inténtalo de nuevo. Cuchara en boca, comida en boca. Comida sabe mal. Barbilla manchada. No, no escupas. Inténtalo de nuevo. Inténtalo de nuevo. Inténtalo de nuevo.

Formas moviéndose, personas. Personas vivas. Formas no moviéndose no vivas. Caminando, formas cambian. Formas no vivas cambian poco. Formas vivas cambian mucho. Formas personas tienen espacio blanco encima. Personas dicen ponte ropas, ponte ropas, ponte bien. Bien es dulce. Bien es cálido. Bien es brillante bonito. Bien es sonrisa, es nombre para cara piezas muévete de esta forma. Bien es voz feliz, es nombre para sonido así. Sonido así es nombre hablando. Hablando dice qué hacer. Personas ríen, es mejor sonido. Bien por ti, bien por ti. Buena comida es bien por ti. Ropas es bien por ti. Hablar es bien por ti.

Personas más de una. Personas es nombres. Usa nombres es bien por ti, voz feliz, brillante bonito, incluso dulce. Uno es Jim, buenos días hora de levantarse y vestirse. Jim es cara oscura, brillante encima de la cabeza, manos cálidas, habla fuerte. Más de uno dos es Sally, aquí tienes el desayuno puedes hacerlo ¿no está bueno? Sally es cara pálida, pelo blanco en la cabeza, no habla fuerte. Amber es cara pálida, pelo oscuro en la cabeza, no tan fuerte como Jim más fuerte que Sally.

Hola Jim. Hola Sally. Hola Amber.

Jim dice levanta. Hola Jim. Jim sonríe. Jim feliz yo dice hola Jim. Levántate, ve al cuarto de baño, usa la taza, quítate la ropa, entra en la ducha. Extiende la mano hacia la cosa rueda. Jim dice bien por ti y cierra la puerta. Gira la cosa rueda. Agua. Jabón. Agua. Se siente bien. Todo se siente bien. Abre la puerta. Jim sonríe. Jim feliz yo me ducha solo. Jim sostiene toalla. Toma toalla. Frótate. Seco. Seco está muy bien. Húmedo está muy bien. Mañana está muy bien.

Ponte la ropa, ve a desayunar. Siéntate en la mesa con Sally. Hola Sally. Sally sonríe. Sally feliz yo digo hola Sally. Mira alrededor dice Sally. Mira alrededor. Más mesas. Otras personas. Conoce Sally. Conoce Amber. Conoce Jim. No conoce otras personas. Sally pregunta tienes hambre. Dice sí. Sally sonríe. Sally feliz yo dice sí. Cuenco. Comida en cuenco cereal. Dulce arriba es fruta. Dulce comida arriba, come cereal, dice bueno, bueno. Sally sonríe. Sally feliz yo dice bueno. Feliz porque Sally feliz. Feliz porque dulce es bueno.

Amber dice hora de irse. Hola Amber. Amber sonríe. Amber feliz yo dice hola Amber. Amber camina a sala de trabajo. Yo camino a sala de trabajo. Amber dice siéntate ahí. Yo sienta allí. Mesa delante. Amber pone cosa en mesa. Qué es esto, pregunta Amber. Es azul. Yo digo azul. Amber dice eso es color, ¿qué es cosa? Yo quiere tocar. Amber dice no tocar, solo mirar. Cosa es forma curiosa, arrugada. Azul. Yo triste. No saber es no bueno, no bueno por ti, no dulce, no brillante bonito.

No te preocupes, dice Amber. Vale, vale. Amber toca caja Amber. Entonces dice Tú puedes tocar. Yo toca. Es parte de ropas. Es camisa. Es demasiado pequeña para mí. Demasiado pequeña. Amber ríe. Bien por ti, toma dulce, es una camisa y es demasiado pequeña para ti. Camisa para muñeca. Amber coge camisa para muñeca y pone otra cosa. También forma curiosa, arrugada negra. No tocar, solo mirar. Si cosa arrugada azul era camisa para muñeca, ¿cosa arrugada negra algo para muñeca? Amber toca. Cosa se agita. Dos cosas salen de abajo, una cosa arriba, pantalones. Dice pantalones para muñeca. Amber hace gran sonrisa. Bien por ti, realmente bien. Dulce cosa para ti. Toca caja Amber.

Hora de almorzar. Almuerzo es comida de día entre desayuno y cena. Hola Sally. Parece bien Sally. Sally es feliz yo dice eso. Comida es pastosa entre rebanadas de pan y fruta y agua de beber. Comida sabe bien en la boca. Esto es bueno Sally. Sally es feliz yo dice eso. Sally sonríe. Más bien por ti y bien por ti. Gusta Sally. Sally buena.

Después de almuerzo es Amber y arrástrate por el suelo sigue la línea, o ponte de pie apoyado en un pie luego en el otro pie. Amber arrastra también. Amber se apoya en un pie, cae. Ríe. Risa sienta bien como sacudirse entero. Amber ríe. Más bien por ti. Gusta Amber.

Después de arrastrarse por el suelo es más juego en mesa. Amber pone cosas en mesa. No conoce nombres. No nombres, dice Amber. Ve esto: Amber toca cosa negra. Encuentra otra, dice Amber. Mira las cosas. Una cosa igual. Toca. Amber sonríe. Bien por ti. Amber pone juntas cosa negra y cosa blanca. Haz eso, dice Amber. Miedo. No sabe. Vale, vale, dice Amber. Vale no saber. Amber no sonríe. No vale. Encuentra cosa negra. Mira. Encuentra cosa blanca. Pone juntas. Amber sonríe ahora. Bien por ti.

Amber pone tres cosas juntas. Haz eso, dice Amber. Yo mira. Una cosa es negra, una es blanca con espacio negro, una es roja con espacio amarillo. Mira. Suelta cosa negra. Encuentra cosa blanca con espacio negro, suelta. Entonces encuentra roja con espacio amarillo, suelta. Entonces Amber toca cosas Amber: rojo en medio, dice Amber. Mira. Hice mal. Rojo en extremo. Mueve. Bien por ti, dice Amber. Realmente buen trabajo. Feliz. Gusta hacer Amber feliz. Bien feliz juntos.

Otras personas vienen. Una con ropa blanca, visto antes, no sabe nombre excepto doctora. Un hombre con jersey de muchos colores y pantalones oscuros.

Amber dice hola doctora a una con ropa blanca. Doctora habla con Amber, dice Éste es amigo suyo, en la lista. Amber me mira, luego a otro hombre. Hombre me mira. No parece feliz, ni con sonrisa.

Hombre dice Hola Lou soy Tom.

Hola, Tom, digo yo. Él no dice bien por ti. Eres doctor, digo yo.

No doctor en medicina, dice Tom. No sé qué significa no doctor en medicina.

Amber dice Tom está en tu lista, para visitarte. Lo conocías antes.

¿Antes de qué? Tom no parece feliz. Tom parece muy triste.

No conozco a Tom, digo yo. Miro a Amber. ¿Es malo no conocer a Tom?

¿Lo has olvidado todo de antes?, pregunta Tom.

¿Antes de qué? Pregunta molesta a mí. Lo que conozco es ahora. Jim, Sally, Amber, Doctora, dónde está dormitorio, dónde está cuarto de baño, dónde es lugar para comer, dónde es sala de trabajo.

No importa, dice Amber. Lo explicaremos más tarde. No importa. Lo estás haciendo bien.

Mejor me voy ahora, dice Doctora. Tom y Doctora se dan media vuelta.

¿Antes de QUÉ?

Amber coloca otra fila y dice Haz lo que yo hice.

—Le dije que era demasiado pronto —dijo la doctora Hendricks, en cuanto volvieron al pasillo—. Le dije que no lo recordaría.

Tom Fennell se asomó a la ventana unidireccional. Lou (o lo que había sido Lou) le sonreía a la terapeuta que trabajaba con él y tomaba un bloque que añadía a la pauta que iba copiando. La pena y la furia se apoderaron de Tom al recordar la mirada vacía de Lou, la sonrisita sin significado que había acompañado al «Hola, Tom».

—Tan sólo lo inquietaríamos si intentáramos explicarle las cosas ahora —dijo Hendricks—. No podría comprenderlo.

Tom encontró de nuevo la voz, aunque no le pareció la suya.

—Ustedes... ¿tienen la menor idea de lo que han hecho? —Se contenía con gran esfuerzo; quería estrangular a esa persona que había destruido a su amigo.

—Sí. Lo está haciendo realmente bien. —Hendricks parecía indecentemente feliz consigo misma—. La semana pasada no podía hacer lo que está haciendo ahora.

Haciendo bien. Estar allí sentado copiando pautas de bloques no era lo que Tom entendía por hacerlo bien. No cuando recordaba las sorprendentes habilidades de Lou.

—Pero... pero el análisis de pautas y la generación de pautas era su don especial...

—Ha habido cambios profundos en la estructura de su cerebro. Los cambios están produciéndose todavía. Es como si su cerebro hubiera revertido en edad, y se hubiera convertido en niño de nuevo en algunos aspectos. Gran plasticidad, gran habilidad adaptativa.

Su tono complaciente lo irritaba; claramente, no tenía ninguna duda sobre lo que había hecho.

Other books

Horsing Around by Nancy Krulik
The Mamacita Murders by Debra Mares
That Furball Puppy and Me by Carol Wallace, Bill Wallance
The Avion My Uncle Flew by Cyrus Fisher
Kalliope's Awakening by Nora Weaving
The Locker by Adrian Magson