Authors: Carlos Ardohain
Pasaron unos días que bien podían haber sido meses, pero no lo eran. Igriega fue un par de veces a la galería, en parte para empezar a desarmar la agencia y en parte para tomar conciencia de que lo que había pasado era real. Tamara, desconsolada, cerraría el local de Tarot y no sabía qué iba a hacer, pero no quería estar más ahí, cada vez que entraba a la galería le parecía ver a Equis, escuchar su voz. Lo esperaba a cada momento, no podía vivir así.
A él le pasaba algo parecido y todavía no terminaba de asimilar el golpe. Con las luces de la galería casi completamente apagadas, se sentó en el escritorio, encendió la computadora y se puso a revisar y releer la novela, ahora le resultaba evidente que a esa historia le faltaba un cierre, y él quería ponerle el punto final sin dejar nada en el tintero. Se puso a imaginar buscando en su bronca y en su dolor. En el silencio y la penumbra de esa caverna se dejó llevar y comenzó a escribir, primero modificó el capítulo 104 aclarando que había olvidado la pistola en su casa y por eso no había podido entregársela a Aurora, la señora Benavídez, en esa ocasión. Enseguida saltó al 107 para escribir que, dejándose llevar por un impulso irracional, había salido de la galería esa tarde y fue hasta su casa, buscó la pistola y se la metió en el bolsillo del saco. Tomó un taxi hasta la casa de Galván y se quedó semioculto por un árbol, esperando. Cayeron las primeras sombras, se hicieron las ocho menos cuarto, y entonces vio llegar el Audi plateado. Se abrió el portón de la cochera y, cuando Galván metió el auto y bajó para entrar en la casa, él cruzó corriendo, apuntó el arma y disparó dos veces. Vio las manchas rojas formarse en el pecho y la cara de sorpresa de Galván que lo miró con los ojos muy abiertos antes de caer de rodillas y desplomarse en el suelo. Dio media vuelta y salió corriendo hacia la esquina. Paró el primer taxi que vio y volvió a la galería. Se sentía extrañamente sereno, limpió el arma con cuidado y la guardó en uno de los cajones del escritorio, el único que tenía llave. Respiró hondo, cerró los ojos y pensó en Equis. Pensó que ahora él había trazado una equis también, había tachado al asesino de su amigo. Se sintió bien, en paz. Apagó la computadora y las luces, cerró la agencia y salió a la avenida.
Al día siguiente los diarios traían la noticia de que un abogado llamado Mariano Galván había sido asesinado de dos disparos en la puerta de su domicilio en el barrio de Colegiales. Aparentemente se habría tratado de un crimen ejecutado por un sicario en el marco de un ajuste de cuentas entre proxenetas, actividad a la que se dedicaba el occiso.
Seis meses después, Margarita e Igriega viajaban a España para asistir a la presentación de la novela
Los incógnitos
, que Igriega había enviado a algunas editoriales, una de las cuales había decidido la publicación con una tirada inicial de diez mil ejemplares y una gran difusión. Habían invitado a Tamara a que viajara con ellos, pero no aceptó; había armado en su casa talleres de lectura e interpretación de Tarot y no quería descuidar esa actividad que la gratificaba y la ayudaba a procesar y superar la pérdida de Equis en su vida, aunque lo llevaría dentro de ella para siempre.
—Estoy contenta, mi amor, tengo mariposas en la panza, pero quería tanto volar con vos...
—Yo también, a lo mejor tendríamos que haberlo hecho hace mucho.
El avión despegó y cuando estaban colgados en el cielo, flotando sobre la superficie del mundo, Igriega dejó volar su mente. Planeando sobre el Río de la Plata se metió por la desembocadura del riachuelo y entró hacia el sur por la avenida que tan bien conocía para que su conciencia pasara un segundo por la galería casi abandonada. En ese recorrido efímero y fugaz consiguió iluminar su recuerdo, pudo ver todos los episodios vividos bajo una nueva luz, entendió ese período de amor, amistad y locura. De pronto todo cerraba, todo tenía sentido, un sentido profundo e inapresable que estaba más atrás del pensamiento y el intelecto, en un lugar de su paisaje interior, pero que era para él tan verdadero y concreto como el latir de su corazón.
Entonces tomó la mano de Margarita, se recostó en su asiento, cerró los ojos y se dejó llevar.
Cuando la novela se encontraba en proceso de impresión, el autor nos ha hecho llegar este recorte de prensa que reproducimos a continuación
:
Edición en formato digital: agosto de 2011
© 2011, Carlos Ruben Ardohain
© 2011, Random House Mondadori, S. A.
Travessera de Gràcia, 47-49. 08021 Barcelona
Diseño de la cubierta: Random House Mondadori, S.A.
Quedan prohibidos, dentro de los límites establecidos en la ley y bajo los apercibimientos legalmente previstos, la reproducción total o parcial de esta obra por cualquier medio o procedimiento, así como el alquiler o cualquier otra forma de cesión de la obra sin la autorización previa y por escrito de los titulares del copyright. Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos, http://www.cedro.org) si necesita reproducir algún fragmento de esta obra.
ISBN: 978-84-96594-87-6
Conversión a formato digital: Newcomlab, S.L.
Consulte nuestro catálogo en:
www.megustaleer.com
Random House Mondadori, S.A., uno de los principales líderes en edición y distribución en lengua española, es resultado de una
joint venture
entre
Random House
, división editorial de
Bertelsmann AG
,
la mayor empresa internacional de comunicación, comercio electrónico y contenidos interactivos, y
Mondadori
,
editorial líder en libros y revistas en Italia.
Forman parte de Random House Mondadori los sellos Beascoa, Debate, Debolsillo, Collins, Caballo de Troya, Electa, Grijalbo, Grijalbo Ilustrados,
Lumen, Mondadori, Montena, Plaza & Janés, Rosa dels Vents, Sudamericana y Conecta.
Sede principal:
Travessera de Gràcia, 47–49
08021 B
ARCELONA
España
Tel.: +34 93 366 03 00
Fax: +34 93 200 22 19
Sede Madrid:
Agustín de Betancourt, 19
28003 M
ADRID
España
Tel.: +34 91 535 81 90
Fax: +34 91 535 89 39
Random House Mondadori también tiene presencia en el Cono Sur (Argentina, Chile y Uruguay)
y América Central (México, Venezuela y Colombia). Consulte las direcciones y datos de contacto
de nuestras oficinas en
www.randomhousemondadori.com
.