Apocalipsis 13.18.
Aquí está la sabiduría. El que tenga inteligencia calcule el número de hombre. Su número es seiscientos sesenta y seis.
Para entender esto, debemos considerar que hasta la Edad Media era corriente emplear letras del alfabeto para significar números. Lo hacían los judíos, los griegos y los romanos. A nosotros nos resultan más familiares los números romanos, donde 1=1, V = 5, X = 10, L = 50, C = 100, D = 500 y M = 1.000. De ello se desprende que las palabras compuestas por tales letras también podrían tener una especie de valor numérico. Si un individuo se llamara Dill McDix, por ejemplo, se le podría asignar a cada letra su valor numérico, sumarlas y alcanzar un total de 2.212.
En inglés es difícil hacerlo, porque sólo unas letras del alfabeto latino tenían valor numérico. Pero en griego y en hebreo cada letra tenía su número. Entonces todas las palabras griegas o hebreas tendrían un significado numérico.
En épocas griega y romana, los místicos judíos supusieron que las inspiradas palabras de la Biblia tenían un significado numérico aparte del literal y pasaron mucho tiempo analizando tales números. Esta actitud se denominó «gematría», corrupción de la palabra griega «geometría».
El «número de la bestia» es una muestra de tal gematría, único ejemplo importante de la Biblia. Algunos comentaristas han considerado prácticamente a todos los candidatos posibles a la bestia, y el que mencionan con mayor frecuencia es Nerón. Si se toma su nombre en la forma griega —Nerón— junto con el título de César, y si Nerón César se escribe en letras hebreas, entonces el valor numérico total es efectivamente 666. Si se elimina la «n» final, el total asciende a 616, y algunos manuscritos antiguos del Apocalipsis dan 616 como el número de la bestia, en lugar de 666.
No obstante, si el libro se redactó en el 95 Nerón es un candidato inadecuado. Hacía un cuarto de siglo de su muerte, que no produjo grandes cambios. Vespasiano llegó al trono al año siguiente, y él y su hijo Tito dieron a Roma doce años de gobierno justo y humano.
Sin embargo, en las fechas en que se escribió el Apocalipsis estaba en el trono Domiciano, hijo menor de Vespasiano, y su persecución de cristianos estaba en su punto álgido. Sería natural referirse de manera elíptica al emperador vivo y perseguidor, y probablemente exista algún medio en que pudiera inscribirse el nombre y el título de Domiciano para llegar a la suma de 666. Es Posible que tuviese un apodo, comúnmente usado por cristianos, con un valor numérico total de 666, cifra que tiene su propia significación mística, pues por tres veces no alcanza la perfección mística del 7. Por esa razón, el 666 era el colmo de la imperfección, número conveniente para representar al Anticristo.
Contra la gran ciudad regida por la bestia y su ejército están las huestes celestiales y los 144.000 justos que llevan el sello de Dios. La victoria del bien está asegurada, pues en el cielo el cántico triunfal es:
Apocalipsis 14.8. ...
Cayó, cayó Babilonia la grande...
Babilonia es Roma, claro está: y Roma será destruida. Tal destrucción la anuncia una tercera serie de siete actos de muerte. Siete frascos de plagas se vacían sobre la tierra, uno cada vez, llevando todos su destrucción particular y horrenda.
Cuando las huestes de la bestia son castigadas sin piedad de esa manera, se dispone la escena para la batalla definitiva entre el bien y el mal:
Apocalipsis 16.16. Y
los juntó
(la bestia)
en el sitio que en hebreo se llama Harmagedón.
Harmagedón es, con más propiedad, «Har-Magedón» o «la montaña de Megiddo». Megiddo, ciudad justo al sur del río Cisón y a 88 kilómetros al norte de Jerusalén, fue escenario de dos batallas importantes. La primera tuvo lugar en el siglo XV aC, cuando Tutmosis III, el gran faraón egipcio, derrotó allí a una liga de ciudades cananeas. Pero eso ocurrió siglos antes de que los israelitas entraran en Canán, y quedaba fuera de su horizonte histórico.
Casi nueve siglos después de la victoria de Tutmosis, se libró en Megiddo una batalla que quedó muy prendida en la conciencia judía. Fue entre el rey Josías de Judá, y el Faraón Necao, de Egipto, en el 608 aC.
2 Reyes 23.29. ...
el faraón Necao, rey de Egipto, subió contra el rey de Asiria... y el rey Josías le salió al encuentro, y el faraón, al verlo, le dio muerte
(a Josías)
en Megiddo.
La muerte del gran rey reformador convirtió a Megiddo en un símbolo especial de calamidades y desgracia. La entera destrucción de las huestes del mal equilibrarían la anterior destrucción del bien en la persona de Josías.
De nuevo queda interrumpido el desenlace, pues sobreviene otra visión. Dice uno de los ángeles:
Apocalipsis 17.1....
Ven, te mostraré... la gran ramera que está sentada sobre las grandes aguas,
Apocalipsis 17.3.
Llevóme... al desierto, y vi una mujer sentada sobre una bestia bermeja, llena de nombres de blasfemia, la cual tenía siete cabezas y diez cuernos.
Apocalipsis 17.4.
La mujer estaba vestida de púrpura y grana, y adornada de oro y piedras preciosas y perlas...
Apocalipsis 17.5.
Sobre su frente llevaba escrito un nombre: ... Babilonia la grande...
Una vez más, Babilonia representa a Roma con todo su lujo y poder. Las «grandes aguas» sobre las que se sienta la mujer están tomadas de la descripción veterotestamentaria de la Babilonia auténtica, que era una ciudad llena de canales. Así, dice Jeremías:
Jeremías 51.12. ...
Yahvé... ha dicho contra los habitantes de Babel.
Jeremías 51.13.
Tú que moras junto a aguas abundantes...
Incapaz de resistirse a citar el Antiguo Testamento, el autor del Apocalipsis debe dar a esto nueva interpretación, haciéndolo de manera bastante ineficaz:
Apocalipsis 17.15.
Me dijo
(el ángel):
Las aguas que ves, sobre las cuales está sentada la ramera, son los pueblos, las muchedumbres, las naciones y las lenguas.
Las siete cabezas de la bestia se explican finalmente de tal modo, que resulta inconfundible la verdadera identidad de «Babilonia»:
Apocalipsis 17.9.
...Las siete cabezas son siete montañas, sobre las cuales está sentada la mujer.
Y prosigue la interpretación:
Apocalipsis 17.10.
y son siete reyes, de los cuales cinco cayeron, el uno existe y el otro no ha llegado todavía, pero cuando venga permanecerá poco tiempo.
Apocalipsis 17.11.
La bestia que era y ya no es, es también un octavo...
No hay medio de interpretar claramente este pasaje a la luz del reinado de Domiciano, pero puede entenderse si se aplica al reinado de Nerón o muy poco tiempo después. Es posible que el autor del Apocalipsis utilice aquí un pasaje de otro apocalipsis anterior compuesto en tiempo de Nerón, haciéndolo sin modificar las cifras.
Si nos remontamos a la época de Nerón, hallaremos que es el sexto emperador (contando primero a Julio César). En ese caso, cinco emperadores «han caído» y «uno existe» (Nerón). El séptimo que «permanecerá poco tiempo» sería Galba, que reinó brevemente a la muerte de Nerón, siendo asesinado por la guardia pretoriana y cuya muerte inició un corto período de anarquía antes de que Vespasiano accediera al poder.
Durante este período el pueblo llano del imperio suponía que Nerón no estaba muerto, sino que había huido para ponerse a salvo y volvería. Aquel año hubo varios «falsos nerones» que trataron de beneficiarse de tal creencia.
Puede ser Nerón, pues, el que en opinión del apocalipsis anterior fuese la bestia «que era y ya no es». Cuando volviese, sería el octavo emperador.
Pero Babilonia/Roma ha de caer. La batalla definitiva entre el bien y el mal tiene lugar (posiblemente en Harmagedón):
Apocalipsis 19.20.
y fue aprisionada la bestia... y... los que adoraban su imagen; vivos fueron arrojados ambos al lago de fuego...
Apocalipsis 19.21.
Los demás fueron muertos por la espada...
Ahora, tras la larga serie de portentos, visiones, desastres y símbolos, ha llegado el fin de la historia y se inicia la era mesiánica. Pero ni eso es realmente definitivo.
Apocalipsis 20.1.
Vi un ángel que descendía del cielo...
Apocalipsis 20.2.
Tomó al dragón, la serpiente antigua, que es el diablo, Satanás, y le encadenó por mil años
Apocalipsis 20.3. ...
después de los cuales será soltado por poco tiempo.
¿Por qué había de seguir a este «milenio» (v. cap. 31) otro cataclismo y otra batalla nada decisiva entre el bien y el mal?
Es posible que haya una simetría mística. La tierra fue creada en seis días, a los que siguió un séptimo de descanso, según el capítulo primero del Génesis. Pero para Dios, un día es como mil años (v. cap. 26). Entonces, la duración de la tierra quizá sea paralela a la semana de la creación, representando cada día mil años.
Primero la tierra debe soportar seis milenios de trabajos, luchas, mal y pecado, uno por cada uno de los seis días de la creación. Después, durante el séptimo día de descanso, la tierra pasará un milenio bajo el Mesías. Sólo entonces, cuando el milenio sabático haya concluido, el mundo podrá llegar verdaderamente a su fin:
Apocalipsis 20,7. ...
será Satanás soltado de su prisión,
Apocalipsis 20.8.
y saldrá a extraviar a las naciones..., a Gog y Magog, y reunirlas para la guerra...
Esto es un eco de Ezequiel, de la visión apocalíptica de la última batalla:
Ezequiel 38.2.
Hijo de hombre, vuelve tu rostro a Gog, de la tierra de Magog...
Las fuerzas del mal vuelven a ser derrotadas y destruidas y ahora, por fin, todo ha terminado, incluso el milenio sabático, y viene el día del juicio:
Apocalipsis 20.12.
Vi a los muertos, grandes y pequeños, que estaban delante del trono...
[12]
fueron juzgados los muertos...
Una segunda creación, perfecta esta vez, sustituye ahora a la anterior e imperfecta:
Apocalipsis 21.1.
Vi un cielo nuevo y una tierra nueva, porque el primer cielo y la primera tierra habían desaparecido...
Apocalipsis 21.2.
Y vi
[13]
la ciudad santa, la nueva Jerusalén, que descendía...de Dios...
La nueva Jerusalén rebosa del simbolismo triunfal del número doce, tanto en el significado antiguo como en el nuevo:
Apocalipsis 21.10. ...
la... santa Jerusalén
Apocalipsis 21.12.
... Tenía un muro grande y alto y doce puertas... y nombres escritos que son los nombres de las doce tribus de los hijos de Israel:
Apocalipsis 21.14.
El muro de la ciudad tenía doce hiladas, y sobre ellas los nombres de los doce apóstoles del Cordero.
Y con la descripción de la ciudad en los términos más vivos posibles, el autor del libro cita las palabras con que un ángel recuerda enfáticamente al lector que todas las profecías se cumplirán rápidamente:
Apocalipsis 22.6. ...
Éstas son las palabras fieles y verdaderas, y el Señor, Dios... envió su ángel para mostrar... las cosas que están para suceder pronto.
Apocalipsis 22.7.
He aquí que vengo presto...
Y con esta promesa, aún insatisfecha casi dos mil años después, concluye el Nuevo Testamento.
(Antiguo y Nuevo Testamento)
Nota. Muchas de las fechas dadas en esta lista son aproximadas o polémicas.
8500 Se establecen las primeras ciudades en Oriente Medio.
5000 Ya existe Jericó.
4004 Fecha de la creación según el arzobispo Ussher.
3761 Fecha de la creación según la tradición judía.
3600 Existen ciudades-estado sumerias.
3100 Egipto se une bajo un poder único; fundación de la I dinastía.
3000 Los cananeos entran en Canán.
2700 Surgen las ciudades asirias.
2570 Se construye la Gran Pirámide de Egipto.
2500 La Edad del Bronce llega a Canán.
2264 Sargón de Acade funda el imperio acadio.
2050 La dinastía XI reina en Egipto; la tercera dinastía reina en Ur.
2000 Inicio de la era patriarcal en Canán (Abraham).
1971 Sesostris I reina en Egipto.
1900 Babilonia comienza su dominio sobre el valle del Tigris-Éufrates; decaen las ciudades-estado sumerias.
1730 Los hicsos penetran en Egipto.
1700 Hammurabi reina en Babilonia.
1650 Los israelitas, en Egipto (Jacob, José).
1570 Los hicsos son expulsados de Egipto.
1500 Asiria se convierte en reino independiente.
1490 Tutmosis III reina en Egipto.
1479 Tutmosis III derrota a los cananeos en Megiddo.
1475 Prospera el reino de Mitani.
1450 Colonos de Sidón fundan Tiro.
1400 Los griegos micénicos, en la cúspide de su poder.
1397 Amenhotep III reina en Egipto, que se encuentra en el punto álgido de su prosperidad.
1390 Los hititas, en la cima de su poderío.
1370 Akenatón reina en Egipto; tentativas de reforma monoteísta; el poderío egipcio empieza a declinar; se fundan los reinos de Moab, Ammon y Edom.
1290 Ramsés II reina en Egipto; opresión de los israelitas.
1275 Asiria conquista el reino de Mitani, iniciando su primer período de poder.
1250 Salmanasar I reina en Asiria.
1235 Tukulti Ninurta I (Nemrod) reina en Asiria.
1223 Merneptah reina en Egipto; el mundo antiguo, convulsionado por las migraciones de pueblos.
1211 Muerte de Merneptah; posible fecha del Éxodo (Moisés).
1200 Destrucción del reino hitita. Colonos de Tiro fundan Tarsis.
1190 Ramsés III reina en Egipto y derrota a los filisteos.
1184 Guerra de Troya.
1170 Los israelitas entran en Canán; los filisteos se asientan en la costa (Josué).
1150 Barac y Débora derrotan a Sísara; período de los jueces.
1116 Teglatfalasar I reina en Asiria.
1100 Gedeón derrota a los madianitas; los griegos empiezan a asentarse en la costa de Asia Menor.
1093 Muerte de Teglatfalasar I; Asiria decae.